Castelló Negre rinde homenaje a Julián Ibáñez, maestro de la novela negra
Por Pedro Tejada
Leer másPor Pedro Tejada
Leer másPor José Antequera
Rosa Montero (Madrid, 1951) vive en un mundo de androides y replicantes. En su última novela, El peso del corazón (editorial Seix Barral), un thriller futurista que trata sobre problemas de nuestro tiempo, recupera a la detective Bruna Husky y el personaje del humanoide que se resiste a morir, un mito […]
Leer másPor José Antequera
¿Existe una novela negra valenciana contemporánea? Lejos de poder dar una respuesta rotunda a una pregunta que solo el tiempo responderá, lo que sí es cierto es que, tras décadas de letargo literario, algo parece moverse por aquellas tierras de edificios babilónicos, playas caribeñas y sórdidos […]
Leer másRaúl Guerra Garrido, en una imagen tomada durante la presentación de uno de sus libros. Por José Antequera / Fotografía: Anaya. Viernes, 8 de mayo de 2015 Es un resistente, un outsider, como le gusta definirse a sí mismo, un escritor que no se deja llevar por modas ni convencionalismos del mercado y que trabaja su obra con la valentía, rigor y sinceridad de un minucioso artesano. Raúl Guerra Garrido (Madrid, 1935) pasó parte de su infancia en Cacabelos, en la comarca de El Bierzo, donde acumula recuerdos de la guerra. Cursa estudios de Farmacia y en 1960 se establece con la familia en el País Vasco. En sus primeras novelas (Ni héroe ni nada, Cacereño) aborda el tema del emigrante y sus problemas para integrarse en un entorno que no es el suyo. Este desarraigo interior va a ser una constante no solo en su obra, sino en su vida, sobre todo a raíz de ser perseguido por los terroristas de ETA. Su farmacia del barrio de Alza en San Sebastián sufre varios ataques Leer más
Leer másPor Ecto Plasta
Nunca pensó que aquello pudiese suceder, pero era evidente que negarlo y no afrontarlo era una forma errónea de hacer las cosas. Encendía el enésimo cigarrillo de la noche y pedía otro whisky en un intento de olvidar aquella trágica semana. Duke sonaba de fondo, sin prisas, a ritmo lento. En el bar apenas quedaban cinco personas. El camarero, cansado y con ganas […]
Leer másPor Cipriano Torres
Leer másPor Pedro Tejada
Leer másPor Cipriano Torres
Leer másPor Cipriano Torres
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